Enrique Alcoba (Abriendo Surcos)



El Secreto de su Sonrisa

Danza, dice la canción. Danza sobre restos de cristales de este tiempo no tan bello; Danza sobre antiguas cenizas, sobre todas tus heridas; Danza sobre tu casa entre la hierba y entre el olor del invierno; Danza sobre tu calle que danza, sobre ésta casa que danza, junto a la vida que danza, si no se puede hacer más. 

Enrique hace más de medio siglo que danza, hace más de medio siglo que entiende la letra de esa canción italiana que cantaba Sandra Mihanovich. 

Quizá algunos de esos refutadores de leyendas que nunca faltan se preguntarán:  Cómo se puede perder tiempo en la danza siendo arquitecto, en plena cosecha récord donde muchos constructores se frotan las manos para ver si, como en el boom de la soja, pueden pasar de pobres a millonarios?; Cómo se puede seguir danzando en una tierra donde la frialdad de la vida cotidiana va dejando poetas, cantores y todo tipo de artistas al costado del camino?. 

Los que miden la vida en pesos, en propiedades y en hectáreas quizá piensen: qué hacen estos giles, vestidos de manera extraña, desplegando sus cuerpos y sus tiempos subidos al escenario con cara de felices, a pesar de las penurias existentes y de las posibilidades de cubrirse de dinero que sus profesiones de arquitecto e ingeniero, podrían darles?. 

Enrique, su hermano Marcelo y los suyos no contestarán esa pregunta. Seguirán sonrientes como siempre Danzando, Danzando a la luz de la luna sobre el campo y el mar, Danzando sobre la desventura y el dolor porque tienen en claro que los dolores no saben danzar y que a esos dolores la danza los consumirá. 

Enrique y Marcelo no van a contestar porque prefieren guardar el secreto. Si los apuran, dirán que están felices porque tienen muchos alumnos, porque los han invitado a conocer un enésimo país, o porque que hay que sonreír ya que queda lindo para el público, pero jamás dirán que la razón de sus felicidades es simplemente la pasión de danzar ya que no es cuestión, como dice un tango aun no escrito, de avivar a la gilada. 

Enrique Alcoba, arquitecto de una danza interminable, bailarín sobre tierras que andan y celoso guardián del secreto de su felicidad.

Agradecemos la participación en este programa de la familia de Enrique Alcoba, de Franco Nieto y Liliana Cáceres de la agrupación Abriendo Surcos, a Adriana Guezuraga y a la Música de Cosa de Duendes y Leandro Romero.

Para escuchar y descargar el programa completo hacer click en: https://ar.ivoox.com/es/hablemos-rio-cuarto-enrique-alcoba-abriendo-audios-mp3_rf_41783513_1.html

Comentarios